CUANDO LA NOCHE SIGUE SIENDO TU CASA

Justo ahora, cuando está a punto de cumplirse un año de vida de La noche es ahora tu casa, el primer larga duración de Pablo Galiano, el músico tiene la necesidad de presentar nuevas composiciones. No es de extrañar, aunque se acerca el aniversario de la edición de ese trabajo, lo cierto es que las canciones llevaban metidas en un cajón algunos años. Afortunadamente, Cuervo Music, el sello que también lleva las carreras de grupos como Angelus Apatrida o His Majesty the King, las rescató apostando así por la personalidad de los oscuros textos de Galiano. Con la filosofía de mostrar nuevo material, el músico, que ha formado parte de agrupaciones como  Blu Culebra, Lola Sioux o Perros de Paja, se presentaba el pasado jueves, 23 de agosto, en la zona lounge de Siroco (Madrid). Luchando contra el clásico Madrid – Barca, que se celebraba esa misma noche, Galiano contó con la ayuda de Laura Rubio (Garaje Jack) a los coros, que viene siendo un apoyo fundamental en sus últimos directos.

Foto: Laura Rubio y Pablo Galiano (por MMC)

Con aire más sombrío, si cabe, que sus anteriores composiones, los nuevos temas de Galiano apuntan a niños muertos, esqueletos errantes, inviernos llenos de cuervos y gente “puesta hasta el culo de setas, que ve cosas raras”. De ese imaginario surgen canciones como ‘La huella del camino’, ‘Redención’, o ‘El bosque’, que no son otra cosa que la plasmación de la caleidoscópica mirada de un creador inquieto que sigue tomando la noche como su casa. Pero una noche que transcurre en las orilla de ríos, de plantaciones de algodón, y alejada de la urbe que impregnaba el primer disco de Pablo Galiano. Pese a que estas canciones fueron interpretadas sin a penas percusión, (tan sólo la pandereta de Laura) se intuye que cuando este noviembre sean registradas en el estudio de grabación de José María Rosillo, se acompañarán de potentes tambores, bombos… que incrementen la angustia, el misticismo y la santería que, de por sí, desprenden las letras.

Pero el pasado jueves también hubo tiempo para recordar el cancionero más antiguo del músico,  formado por temas como ‘Toda mi gente va a ir al infierno’, ‘Dame un instante’ o la cruda y dolorosamente cierta, ‘La noche es ahora tu casa’, que últimamente suele ser el broche de todos los conciertos.

Pactos con el Diablo y elixires peligrosamente mágicos a parte, escuchado lo escuchado, quizás estemos ante la versión 3.0 de Robert Johnson. Habrá que esperar hasta 2013 para verlo.

MMC

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