Toni Zenet crea canciones trabajando el jazz sureño y el soul a la antigua usanza, bajo patrones de improvisación. No son tangos, tampoco boleros, están alejados de géneros ya inventados pero nos resultan familiares. Es como si lleváramos escuchando a Zenet toda la vida. Es como si todos los sonidos se convirtieran en uno y desembocaran en “Todas las Calles”, el último trabajo de Zenet.

 

.- En tu segundo trabajo sigues evocando el bolero, el tango, el jazz… no te cansas de ellos.

No , pero no porque yo sea bolerista, es porque todos los géneros son interminables. La poesía es interminable, la pintura también. Nosotros lo que hacemos es reinterpretarlo todo. Hay mucha gente que dice “¿pero quien dice que esto es bolero o swing o jazz?”. Es que no es eso. Si hay que definirlo de alguna forma es difícil definir este estilo. 

.- Es la manía que tenemos ,sobre todo los medios de comunicación, de ponerle etiquetas a todo

No, pero nos pasa a todos. El ser humano necesita referencias visuales, literarias…porque cualquier referencia anterior nos sirve para explicar lo posterior. Creo que es un defecto sobre todo porque tenemos una lengua muy rica y me parece interesante buscar nuevos adjetivos para poder redefinir un género. Pero bueno, esperemos que llegue algún día…

.- ¿Cómo redefinirías tú el género?

Lo que hacemos nosotros es reinterpretar los géneros. Pillamos un bolero y lo deconstruimos, como la nueva cocina. Si en un bolero tienes la tónica dominante en do o en re sostenido o en fa, pillamos eso y sólo nos quedamos con esa nota. Construimos a partir de ahí. Igual con el tango, si el tango tiene una tónica dominante la pillamos y a partir de ella empezamos a trabajar. Deconstruimos para poder reinterpretar. No lo hacemos de manera consciente. Lo que intento es no repetir estructuras ya hechas. Nuestra premisa es no repetir estructuras armónicas. Lo hacía Picasso también, “todo menos repetirse”.

.- ¿Cómo ha sido el proceso de grabación?

Muy muy interesante. Para eso hemos grabado un documental y hemos hecho dos ediciones del disco, una de ellas va con Dvd y otra sólo el disco para quien sólo quiere la música. Ángel Araujo ha estado con nosotros todo el rato y hemos podido tener el testigo visual de cómo se hace una canción desde que nace frente al mar hasta que llega al estudio y se termina. He intentado que el estudio fuera un lugar de creación, no un lugar donde se llega y uno mira el reloj. 

.- Si hay algo que caracteriza a tu música es la riqueza instrumental ¿es complicado llegar a lo que quieres?

No es complicado por una razón. Si lo hiciéramos como hasta hace poco: tú le das una partitura a un invitado y éste se la tiene que aprender de memoria y si no lo hace exactamente igual debe repetirla 25 veces, es complicado, pero no lo hacemos así. Yo lo hago al revés, el invitado llega sin partitura, yo le presento una idea y él improvisa sobre eso. Es bastante divertido. Trabajamos como los antiguos, como lo hacía toda la gente de la costa este , del jazz sureño, Chet Baker, Frank Sinatra….

.- ¿Y cómo se lleva esto al directo?

En directo trabajamos muy al tipo jazz. Tenemos unas partes obligatorias donde se ha de cantar el tema, lo que el público espera que se cante, pero después dejamos unos compases abiertos para que cada músico haga lo que le dé un poco la gana sobre la tónica dominante. Después volvemos otra vez a la tónica dominante para que el “cantonto” vuelva a hacer lo suyo (risas).

 .- De esta manera, un concierto nunca es como el anterior ¿no?

Que va, que va. Nunca. Un día me pilla resfriado, un día hacemos un trío, otro un cuarteto, otro metemos trompeta, al siguiente metemos un trío de cuerdas…A mi me gusta pensar que está vivo. 

.- Has vuelto a contar en este disco con Javier Laguna en la letra ¿por qué?

No hay nadie que escriba para mi como él. De hecho él dice que no hay nadie para él que cante como yo y no hay nadie para nosotros que toque la guitarra como Jose. En ese sentido hay una admiración reciproca. Y como dicen los ingleses, si funciona, ¿para qué cambiarlo? 

.- Eres un auténtico showman, ¿cómo reacciona la gente en un concierto tuyo?

Pues se emociona mucho. He visto a gente llorar, reírse, levantarse…creo que hay un tipo de música en la que todo tiene que estar cronometrado pero hay otro tipo de música que no es así. La nuestra. Es como una corrida de toros, nunca sabes si te va a pillar el toro o no… En ese sentido he visto cosas impresionantes. Gente que lloraba en el público. He tenido que hacer un acto de autocontrol, porque yo también me emociono y tengo que mirar para otro sitio o acabo llorando también. Ocurren cosas muy graciosas, muy del siglo de oro. Se levanta uno de repente y grita “OLE”.

 

.- ¿Tú música está hecha para grandes auditorios, estadios de fútbol? Quizás en esos lugares pierda el encanto ¿no?

Bueno, mi record está en 9.000 personas. Y se movían todos al compás de Dientes De Rata, en el Womad de Canarias. Depende mucho de las condiciones técnicas. Allí era maravilloso porque cada 50 metros había dos bafles del tamaño de un edificio. Eso hace que mis matices se aprecien…Caetano Veloso lo ha hecho para 15.000  ¿por qué no?.José Feliciano… Siempre se piensa que tienes que ser los Rolling Stone. Lo que no puede ser es que sólo tengas dos bafles para 15.000 personas. 

.- ¿Por qué “Todas las Calles”?

Estuvimos rebuscando en todas las canciones de este disco y encontramos en el penúltimo corte una frase que decía “todas las calles hacen esquina con la tuya”. Vimos que definía muy bien lo que queríamos contar, que todas las calles llevan a Roma, que todas las músicas son la misma música, que todos los puertos dan al mismo mar…A partir de ahí montamos toda la imagen del disco. 

.- En las letras de tus canciones hay mucho desamor ¿por qué?

No creo que sea desamor pero Javier Laguna, el poeta, utiliza el amor como pretexto para hablar de la condición humana.  Cuando tienes letras como “quiero tirar piedras al sol a ver si lo alcanzo” el amor se trata como una excusa para hablar de los compromisos personales que tienes contigo mismo y que no consigues cumplirlos nunca.  Se habla de esperanza, de que seguimos siendo niños, de que no podemos dejar de soñar…Si las historias fuesen más concretas, no existiría tanta gente que se sintiese identificada. Es muy lindo como cada uno tiene su versión de cada canción, yo no entro en cambiarle la onda.

.- Supongo por lo que dices que la interpretación que le das tú a aesas canciones muchas veces es distinta a la interpretación que le da Javier.

Claro , claro. Muchas veces discutimos (risas). Le propongo: “ ¿y si corto aquí una sinalefa y tal…?” y me dice : “no, no lo hagas!” . Yo creo que la poesía y la música cuando se mezclan es como un cuadro y en ese cuadro la gente coge lo que le da la gana. Y hay veces que no te explicas como la gente hace esos análisis. Una vez me preguntaron que si me gustaban los animales por algo que decía en una canción…. (risas).

 .-Nos vamos a ir ya pero antes, me gustaría que me dijeses qué lugar crees que ocupa tu música en el panorama musical actual.

Pues mira, me lo has puesto a huevo. Hay una frase que recordaré toda mi vida que me dijo una señora que me pidió una firma después de un concierto: “ocupas un lugar en la música que estaba vacío”. Esa frase me emocionó, pero hasta tal punto que casi se me caen las lágrimas. Yo nunca he pretendido eso, sino que he hecho en todo momento lo que a mi me gustaba. No sé qué lugar será ese, pero si lo dijo esa señora, algún lugar será.

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MMC