Hola a todos!!. En el año 1993 (yo tenía 14 años) se publicó un disco que cambió mi concepción musical a la vez que me descubrió a uno de los guitarristas con los que más tiempo estuve flipao, el disco es Blues Alive, y el guitarrista era Gary Moore.

El colaborador de esta casa Pepe Calderón se compró el disco en vinilo un año después de que saliera. Era una edición limitada y numerada que seguramente parará en algún sitio insospechado teniendo en cuenta que el orden no es la máxima cualidad del señor José :).  Recuerdo que me lo prestó y me quede absolutamente alucinado por el sonido de la guitarra de ese disco. Unas garras llenas de distorsión y sustain salían de los altavoces de mis auriculares y me llenaban la cabeza de solos brutales, riffs salvajes y de blues, con un estilo completamente fuera de mi alcance y del alcance de cualquier otro ser humano, ese era el estilo de Gary y de nadie más.

Recuerdo también que una mañana de domingo, en plenas vacaciones navideñas, pusieron en la segunda un concierto de esa gira, que todos grabamos en VHS, y que repasamos una y otra vez, tratando de adivinar las escalas imposibles con las que el señor Moore nos hacia vibrar, con las narices apoyadas en la pantalla de la tele y con la guitarra en las manos… en Daimiel, de donde yo vengo, y con 15 años, no tenía a nadie que me enseñara  a tocar blues, solo Gary Moore y B.B. King, que le acompañaba al final de ese video tocando una acojonante versión de The Thrill is Gone. Recordando el video ahora, creo que aprendí a tocar blues con esa canción.

Durante una época de mi vida muy importante discos como “Still Got the Blues“, “After Hours” y el mismo “Blues Alive” fueron mi banda sonora, después los inescrutables caminos del blues me llevaron a otra parte, lejos de su primera época con la que nunca llegue a conectar a pesar de que discos como el “Corridors of Power” también tuvo mucho tiempo de rodaje en mi tocadiscos, y de los posteriores discos de blues más purista y menos enérgico, a pesar de ser grandes discos, ya no me sonaban a lo mism0, como el homenaje a Peter Green, “Blues for Greeny” o el “Back to the Blues”.

Con el tiempo he cambiado de gustos mil veces, he escuchado toda la música que he podido (nunca la suficiente) y puedo decir que el blues es el estilo musical que más me llena. Cierto es que ahora prefiero a los clásicos como Muddy Waters o Howling Wolf, que poco tienen que ver con aquel blues de guitarras tan energicas y apisonadoras, pero se que no habría llegado a ellos sin Gary Moore.

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Gracias Gary y descansa en paz.

Miguel LCR