The Vegabonds es la unión de dos bandas y de un grupo de jóvenes músicos de Alabama. De allí viene “Dear Revolution”, el primer trabajo que ha dado lugar a un segundo LP, titulado “Southern Sons”. Daniel Allen (vocalista), Alex Cannon (voz y guitarras), Bryan Harris (batería), Richard Forehand (slide, guitarra y coros), Jamie Hallen (teclados) y Paul Bruens (bajo) conforman una de las bandas más punteras de una pronta y prometedora fábrica de rock como es Alabama. Alex Cannon se explica de manera extendida para todos aquellos que quieran tragar polvo.

Charly: De Alabama y con ganas de revolución, ¿lleváis ardor guerrero en la sangre?

Alex: Sí, tenemos la sangre del guerrero. Todos somos muy del sur y nos consideramos “combatientes”, lo que significa que iríamos a la batalla si eso fuera necesario.

C: De Alabama por vuestra ciudad y revolución por el título de vuestro disco, “Dear Revolution”. Son tiempos de revolucionarios viendo como está el mundo, ¿puede una canción o un disco ayudar a cambiar las cosas?

A: Sí, con una canción o con un disco se puede cambiar todo. Un simple ejemplo sería cuando alguien está teniendo un mal día y ponen en una determinada canción para animarse. La música provoca cambios en el estado de ánimo y también en el proceso del pensamiento y es por eso que sirve como una vía de escape de este mundo. Sé que hay un montón de personas por ahí que aún se abrazan al verdadero significado de la música. Así que sí, la canción o el disco pueden ofrecer muchos cambios… y además muy buenos cambios.

C: Me consta que The Vegabonds se formó a raíz de la unión de dos bandas y distintos gustos, ¿cómo surgió esta unión?

A: Bryan (batería), Paul (bajo) y yo (guitarra) estuvimos en una banda llamada TopHouse. Yo y un amigo formamos la banda cuando llegamos a la universidad en 2006, y Bryan y Paul se unieron no mucho después. Luego, Danny (vocalista) estuvo en un grupo llamado Danny and The Tanks. Ambas bandas fueron un cuarteto. Nos habíamos visto otras veces tocando en la ciudad y creo que todos sabíamos que íbamos a terminar haciendo música juntos. Así que le preguntamos a Danny si quería combinar bandas y perder un poco de tiempo. Funcionó, porque nuestro cantante no quería tocar más, y el resto de la banda de Danny iban por caminos separados.

Cuando nosotros cuatro estábamos listos, decidimos llamar Richard Forehand, que había estado con mi banda hacía unos meses. Nadie sabía de Richard en su momento, pero le preguntamos si podía unirse a una jam con nosotros y nos dijo que sí. Por suerte, el tenía alma sureña en sus dedos, así que le invité a unirse a la banda.

Finalmente, pensamos que un teclado o un órgano encajarían muy bien en el sonido que queríamos, entonces Danny y Paul dijeron que conocían a un tipo. Llamaron a nuestro teclista de ahora, Jamie, y empezamos a tocar juntos. Así que nadie se conocía entre sí en un principio, menos yo, Paul y Bryan. Todos los demás cayeron en su lugar a medida que se fueron fusionando las bandas y se combinaron nuestras ideas.

C: ¿Pero hubo problemas en las bandas anteriores?

A: En realidad no, todos nos llevamos muy bien. Por suerte, ya éramos amigos cuando empezamos en la banda original. Así que trataremos de hacerlo lo más divertido posible cuando se atasque esto.

C: Supongo que no sería algo muy complicado, pero, ¿os desanimasteis viendo que había que empezar otra vez desde el principio?

A: Bueno, ya teníamos una reserva de contactos y el apoyo suficiente como para poder empezar por nuestra cuenta otra vez porque gracias al haber estado en las bandas anteriores, de modo que eso lo hizo mucho más fácil. Nuestro primer show como banda fue en el Skybar en Auburn, Alabama, en Junio de 2009. Estábamos realmente emocionados. Creo que habíamos preparado una treintena de canciones en dos semanas (versiones) para poder tocar ese local. No mucho tiempo después comenzamos a escribir las canciones originales, juntos por primera vez.

C: Y hasta el 2010, donde debutáis con”Dear Revolution”. ¿Qué expectativas teníais?

A: Creo que todo se movía muy rápido desde el principio y nadie ni siquiera pensaba en ello. Creo que la mentalidad general en todos nosotros ha sido siempre la de seguir adelante cada día. Contamos el tiempo que estamos avanzando y vemos estamos bien. Sin duda, nos sabíamos que queríamos grabar un disco juntos a pesar de que mis expectativas en ese momento eran sólo para grabar un disco y ver qué pasaba. Por suerte, todavía estamos aquí.

C: Finalmente el álbum alcanza muy buenas críticas, ¿este reconocimiento es suficiente para continuar con el proyecto?

A: Las buenas críticas que hemos recibido han sido un factor de motivación muy importante para nosotros. Es difícil juzgar la propia música, así que cuando la gente dice que le gusta nuestra música nos hace sentir muy bien. Nos hace sentir que este es nuestro propósito para hacer música. Siempre que la gente diga que le gusta lo que escribimos, vamos a seguir escribiendo.

C: Además de la ayuda para tocar. ¡Nada más y nada menos que casi ciento cincuenta conciertos! Es una barbaridad para un grupo que “empieza”.

A: Me encanta. Todos decidimos desde el principio que queríamos ser una banda que iba a estar de gira constantemente, por lo que intenté hacer una contratación con el mayor número posible de conciertos. Tocamos en cualquier lugar y en todas partes cuando empezamos porque queríamos tocar y quería hacer llegar la música a la gente. No sabía muy bien cómo eran fueron muchos espectáculos donde habíamos actuado hasta que volvíamos. Nos sorprendió cuando vimos que se trataban de que muchas buenas críticas. Con suerte, vamos a hacer más de doscientos conciertos en el próximo año.

C: Hablemos de una canción en especial que ha sido la protagonista de vuestro incipiente éxito, ‘Ballad of the movers and shakers’. ¿Una canción así se termina convirtiendo en la favorita de la banda?

A: Sí, a todos nos gusta ‘Ballad of the movers and shakers’. Es una canción tan enérgica que siempre parece una bomba que hace disparar a la multitud hacia arriba. También fue la primera canción que escribimos juntos. Así que creo que tiene un significado especial para todos nosotros. Dice lo que más o menos explica: sólo hacer bailar a todos y agitarlos.

C: Incluso tras escuchar este tema reparo en que vuestro sonido es más próximo al rock de L.A. que al árido rock sureño. ¿Qué tipo de ideas hubo durante la producción?

A: Muchas ideas, algunas se quedaron plasmadas en el disco y algunos que lo hicieron. Una de nuestras filosofías es la de no escribir algo que hemos escuchado antes. Tratamos de pasar los límites un poco y escribir lo que estamos sintiendo en ese momento, independientemente de cómo se sale o qué en que género encaja. Nos sentimos tal y como lo escribimos, somos nosotros. Además, una de las principales ideas que hay detrás de nuestros dos primeros discos será mantener el crudo sonido del directo tanto como sea posible. Somos el tipo de chicos que gustan de las viejas grabaciones de The Rolling Stones, Jimi Hendrix, The Allman Brothers… ese tipo de sonidos que simplemente no oirás nunca jamás. Yo no diría que hemos capturado el sonido por completo, pero esa era la idea detrás del sonido principal.

C: Otras dos canciones con gancho fueron ‘The Wanderer’ y ‘Shaky Hands’, pero la letra que me intriga realmente es la que da título al álbum, ‘Dear Revolution’. ¿En qué acontecimientos os habéis basado para escribirla?

A: Simplemente queríamos decir que no hay divisiones en el mundo. La música es un lenguaje universal; habla a todo el mundo y lo oye. A veces, todo el mundo sólo tiene que detenerse y escuchar. Creo que esa fue una de las últimas canciones que escribí para el primer álbum. La escribí poco después de decidir el nombre del álbum. Queríamos que resumiera todo.

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=2P-GHCtcLGw&feature=related[/youtube]

C: Y tras esta explosión, ya estáis trabajando en “Southern Sons”. ¿Confiáis en que el segundo disco es un asentamiento en la música?

A: Sí, nosotros confiamos en el segundo álbum completamente. Esperamos que todos lo sientan de la misma manera que lo hacemos nosotros, pero no sé si algo podría cambiar de cómo nos sentimos al respecto. Fueron muchas horas de beber, escribir, reír, pensar, jugar, etc. Se trata de poner todas nuestras emociones en un álbum. Nuestro objetivo es simplemente mejorar en los álbumes.

C: ¿Qué cosas nuevas se pueden encontrar en “Southern Sons” que no encontremos en “Dear Revolution”?

A: Grabamos el álbum en un estudio diferente, pero con los mismos productores, por lo que la calidad es mejor. Además, sentimos que el “sonido” de este segundo disco es lo que estábamos buscando un poco al principio. Es lo que consideramos una mejor toma en el sonido de nuestra banda.

C: Casi como hemos empezado la entrevista, tengo otra pregunta. El título de “Southern Sons” indica de donde venís, pero ¿os consideráis hijos de la revolución?

A: Todos somos hijos de la revolución. El nombre vino de que todos nosotros somos del Sur, lo que nos hace –como dice el título- hijos del Sur. Además, creemos que el nombre abarca una hermandad y eso es lo que nos sentimos. A nada de decir eso alguien dijo: “Southern Sons” es perfecto para el título del álbum. A todos nos pareció una buena idea que de inmediato nos encantó. No lo pensamos dos veces.

Texto: Charly Hernández